Hacienda va a revocar el NIF de las sociedades que no depositen durante cuatro años sus cuentas anuales en el Registro Mercantil.
Para ello se ha modificado el Reglamento General de las actuaciones y procedimientos de gestión e inspección tributaria, con el objetivo principal de fortalecer el control por parte de la Administración tributaria a entidades inactivas o con escasa o nula actividad, que con frecuencia son utilizadas para prácticas fraudulentas.
La ampliación de los supuestos en los que la Administración tributaria puede revocar el NIF puede tener además un efecto disuasorio sobre aquellas empresas que incumplen con la obligación de depositar las cuentas anuales en el Registro Mercantil durante cuatro ejercicios consecutivos. Además, esta medida también puede ayudar a mejorar la transparencia y la información financiera de las empresas, ya que el depósito de las cuentas anuales en el Registro Mercantil es una herramienta fundamental para el conocimiento de la situación económica y financiera de una empresa.
Es importante destacar que la revocación del NIF tiene graves consecuencias para las empresas, como la imposibilidad de cumplir con la mayoría de sus obligaciones fiscales y de relacionarse con Administraciones Públicas y Entidades de Crédito. Por lo tanto, se espera que esta medida incentive a las empresas a cumplir con sus obligaciones fiscales y a mantener una adecuada transparencia en su información financiera.
No nos cansaremos nunca de insistir en la necesidad de invertir los recursos necesarios en contar con una adecuada administración de las sociedades, tanto en los aspectos legales, tributarios y administrativos, basados siempre en la llevanza de una contabilidad ordenada, adecuada a la actividad de la empresa que permita un seguimiento cronológico de sus operaciones. No lo decimos nosotros, lo señala el propio Código de Comercio y a su vez la Ley del Impuesto sobre Sociedades.
La gestión contable y administrativa de las empresas ha evolucionado notablemente, han pasado ya los años de la contabilidad manual, incluso la forma en que los expertos contables asisten a sus clientes, popularizándose la utilización de programas informáticos (ERP) que permiten a la empresa realizar el trabajo diario y al experto asesorar de una forma más eficiente.
Un ERP (Enterprise Resource Planning, por sus siglas en inglés) es un software que integra todas las áreas y procesos de una empresa, desde la gestión de compras y ventas hasta la contabilidad, pasando por la gestión de inventarios y la producción, entre otros. En este sentido, el ERP es una herramienta muy útil para la gestión de pequeñas empresas, ya que permite integrar toda la información y los procesos en una sola plataforma, lo que facilita la toma de decisiones y mejora la eficiencia de los procesos empresariales.
Del mismo modo, como expertos en gestión contable y tributaria, asesoramos a nuestros clientes en su implantación y la adaptación a las necesidades de la empresa, simplificando (cuando no automatizando) la emisión de facturas a clientes, proceso de facturas de proveedores y la gestión de tesorería.
Autores:
Emi Santos
Miriam Sanchez